jueves, 25 de septiembre de 2008
Un tiempo en tono gris
No pudo haber mejor muestra del actual estilo del gobierno cubano. Acostumbrados al despliegue y carisma de Fidel Castro, el barbudo encantador de serpientes, Cuba mandó a Naciones Unidas al más gris de sus funcionarios. El vicepresidente José Ramón Machado Ventura cumplió un escuálido cometido en la sede del organismo internacional, en Nueva York, con motivo de su Asamblea General. Se trata del mejor ejemplo por el período de crisis por el que pasa Cuba. Pero no me refiero ni a la situación creada por los huracanes ni al bloqueo norteamericano. Si no al tiempo de letargo por el que atraviesa la isla, gracias a sus actuales gobernantes. Raúl Castro afirmaba hace sólo una semana que "hace falta que las personas sientan la necesidad de trabajar, y no la sentimos'', sin embargo con ese estilo de mando, sin golpes de timón y sin decisiones llamativas y novedosas, difícil resulta entusiasmarse.